¿Es necesario el tratamiento psicológico después de un aborto?
El aborto puede ser uno de los acontecimientos más traumáticos para una mujer y/o una pareja. Los sentimientos y emociones que la mujer puede sentir después de un aborto, tanto espontáneo como programado, son variadas y suelen estar desatendidas por familiares y conocidos, quizás por la idea de que perder un bebé no nato es menos doloroso que una ya nacido.
Pero la realidad es que el aborto es un duelo y muchas mujeres que han perdido un niño no nacido sufren fuertes emociones que han de ser tratadas por profesionales.
El dolor, la tristeza, la rabia, el sentimiento de inadecuación, el miedo a no ser madre de nuevo, la sensación de infertilidad, los posibles problemas y discordancias con la pareja con el tema del duelo o de ser padres de nuevo, en definitiva, un mundo de sensaciones que pueden llegar a atormentar. Además, a la tristeza del duelo hay que sumarle los cambios hormonales que se producen en el cuerpo de la mujer, que estaba siendo preparado para el futuro niño que ya no llegará.
Por ello ofrecemos apoyo piscológico en Unidades Medicas de la Mujer para ayudar a superar la pérdida por aborto.
¿Qué puedo hacer cuando he sufrido un aborto?
- Apoyos y comprensión: lo peor que puede hacer una pareja cuando sufre un aborto es entrar en juegos de culpabilización. Cada uno siente el duelo de la forma que puede y necesita, y también de la forma que ha aprendido. Nadie se espera que el niño llegue a no nacer, y nadie nos prepara para ello. Es por eso que el aborto requiere de apoyo, empatía, mucha comprensión, cercanía y confianza. En Unidades Medicas de la Mujer ayudamos a través de la terapia de pareja o individual a entender los diferentes procesos de duelo, tanto el propio como el de la pareja, a mejorar la confianza y la comunicación, y a reestructurar la pareja, el vínculo y la visión de cada uno de las personas para poder pasar esta dura etapa.
- Tiempo para el duelo. El aborto, como todos los duelos, tiene sus fases y no podemos adelantar ninguna de ellas. Es necesario pasarlas y hacer los diferentes aprendizajes y curaciones que cada una de estas fases necesita. La psicóloga de Unidades Medicas de la Mujer ofrecen su apoyo y acompañamiento en el duelo desde la compresión y el apoyo, reestructurando y generando junto al paciente la mejor forma de comprender los porqués, la mejor forma de contactar con la tristeza. En definitiva, ofrecemos un espacio seguro donde pasar el duelo y reconciliarse con la pérdida y con la vida.
- Cuidarse: a veces en estos momentos las personas se alejan del autocuidado. Dejar de comer, de relacionarse, de dormir o de atenderse a uno mismo o a los otros no es la solución ni acelerará el proceso. Ayudamos a la persona a contactar con los momentos duros, pero también con la vida y con la necesidad de seguir adelante.
- Comprender la pérdida: Trabajar la vergüenza y la culpa con la persona: Además de la tristeza y la rabia, la culpa y la vergüenza son dos emociones que no se pueden olvidar en los procesos de duelo. Si la mujer ha perdido de forma espontánea al bebé, pueden generarse pensamientos en ella del tipo: “no me cuidé lo suficiente”, “no soy capaz de tener hijos”, “no soy como las demás mujeres”, etc. El miedo es otro factor a tener en cuenta, puede que la mujer crea que no será ya capaz de tener un bebé en el futuro. Si el aborto ha sido decidido, la mujer puede sentir culpa por tomar dicha decisión y vergüenza al contarlo. Las preguntas del tipo “por qué” también suelen generar fuertes emociones que deben ser trabajados por la ayuda de un profesional.
- La relación con el medio que le rodea: cuando se pierde un bebé, las personas del entorno de la mujer pueden no entenderlo: “debes superarlo ya”, “no es para tanto”, “enfócate en un nuevo hijo”… Estas frases, aunque pueden ser dichas para ayudar a la mujer a avanzar, invalidan sus sentimientos y lo que su propio cuerpo le transmite. Si bien es cierto que no es bueno quedar anclado en un duelo, no es más beneficioso hacer como si no hubiera pasado nada, o “taparlo” en lugar de gestionarlo. El duelo duele, y escapar de ese dolor solo hará que la herida no se sane. La psicoterapia puede ser una herramienta fundamental en estos momentos de la vida.
- Hablarlo sin miedo: parte de la terapia se basará en el diálogo con el doliente. Es importante gestionar todos aquellos pensamientos, emociones y sensaciones corporales que se producen en el duelo. Evitar hablar sobre ello solo hará que el dolor se acumule en nuestro interior sin llegar a resolverse nunca.
- No podemos olvidarnos del tratamiento de la pareja que ha perdido el bebé. El duelo es un momento complicado y doloroso. Tanto la mujer como su pareja pueden necesitar tratamiento psicológico.
¿Cómo saber si estoy preparada/o para tener otro bebé?
Aunque la mujer, corporalmente hablando, esté recuperada tras el aborto, no se puede olvida que mente y cuerpo son uno y que la recuperación emocional puede durar mucho más tiempo. Tener un bebé antes de tiempo puede ser más perjudicial que beneficioso. Recordemos que el embarazo produce fuertes cambios en el cuerpo de las mujeres, a nivel físico y hormonal.
Aunque el deseo de tener un bebé sea muy grande, exponerse muy de seguido a esos cambios pueden desequilibrar a la mujer. Por otro lado, los bebés vienen acompañados de deseos, esperanzas, miedos, preguntas, inquietudes… Si la mujer y la pareja no están fuertes tras la pérdida del bebé anterior, puede que esto afecte de manera negativa al nuevo hijo o hija.
Otra posibilidad es que la mujer o la pareja no se sientan preparados e incluso sientan miedo que no desaparece con el tiempo después del aborto. Ideas del estilo de: puede haber un nuevo aborto, o la desilusión y el sufrimiento del primero, pueden generar conductas evitativas.
Realiza un tratamiento para superar la pérdida por aborto de manera confidencial y segura en Unidades Medicas de la Mujer.
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